CONGRESO TRINITARIO INTERNACIONAL

Teniendo como punto de partida la explicación y el lema del congreso, hemos buscado una imagen que ayude a reflexionar y pueda aportar profundidad al contenido.

La huella de la mano abierta simboliza entrega, servicio, camino y denuncia para anunciar. Ser Uno con todos y para todos, encarnar el misterio de la Trinidad en toda la humanidad sin distinción.

La huella de la mano en el cristal, nos habla de compromiso sin fisuras, de dar la vida. Nos habla de SER con los demás, somos hermanos.

Detrás del cristal se vislumbran sombras, siluetas de personas que reflejan distintas realidades, tantas como personas hay.

El corazón en la palma de la mano, nos recuerda que NADA, ni siquiera el martirio de sangre tiene sentido sino es por Amor.

Es posible vivir la unidad desde la comunión, es posible si abrimos nuestra mente y nuestro corazón más allá de lo aprendido, de lo establecido, de lo previsto. Es posible desde la Encarnación.

En el cartel la imagen, es la gran protagonista junto con el lema, hemos querido que el cartel no sea solo un instrumento publicitario del congreso, sino que forme parte del contenido.